Experiencia surrealista, entre lo sublime y lo patético, hay algo que no acaba de funcionar bien aunque la sala propone brillantes ocurrencias. Lo que nunca olvidaré es que he atendido a un viandante que se ha "colado" durante la partida y que buscaba información sobre cómo reservar... ¡Metaescapismo, unos buscan salir y otros buscan entrar!