Es un privilegio poder pasar una hora "escapando" en un marco como este. A pesar de las lógicas limitaciones de infraestructura la experiencia resulta más que recomendable gracias al mimo con el que se ha diseñado y a como se conducen las partidas.
El "Can Bruna" del Norte. Aunque es un escape de corte clásico es entretenido y la visita al precioso pueblecito donde está ubicado merece la pena. Ver enlace en Facebook
Sala originalmente de experiencia pura que se ha modificado por exigencias del público mayoritario con la adición de puzzles clásicos. La verdad es que nos hubiera gustado poder jugarla en su diseño original pero igualmente es altamente recomendable. Ver enlace en Facebook
Magnífica sala que viene a ser un Swat con algún elemento de La mina. Realmente es de tanta calidad lo que se ofrece que la repetición del modelo de las salas anteriores queda más que justificado.
Una sala que deja una sensación un tanto extraña... Es magnífica en muchos aspectos y la historia que cuenta es mucho más interesante de lo que en un principio parece. Así pues los jugadores que comprendan lo que está sucediendo tendrán un extra de emoción al salir pero desde mi punto de vista no se cuidan detalles que son básicos, sobretodo respecto a la jugabilidad, por lo que al final no es tan divertida como debiera.
Sala que destaca por un fuerte componente de terror inteligentemente orquestado. De todos modos todavía le falta algún tiempo para acabar de ajustar elementos de jugabilidad.
Obra maestra. En Q-Ki Escape creemos que el mejor de los escape room no tiene por qué tener puzzles. La experiencia que se vive ahí dentro está más allá de abrir un puñado de candados... Eso sí, hay que entrar dispuesto a dejarse llevar y permitir trabajar a la propia imaginación.
Sala divertidísima que combina terror con humor. En ella podemos encontrar a uno de los pocos personajes que es capaz de rivalizar en carisma con el mismísimo Mii de Hostal 83.